miércoles, 5 de marzo de 2008

vacio

Mentira.
No sos de esa otra clase.
No entras entre los que fluyen.
Ni te animas a romper el aletargo encantado de la sonrisa que no asoma.

El piso se rompe.
Pero no caes.
No llega el golpe.
Solo tiemblan los músculos especulando estallar pronto.

Y la foto que no aparece en la cabeza.
Solo pasto alrededor de un par de brazos enterrados.

(nunca se sabrá lo que no es tenerte más que en ausencia)

antes

antes de ayer soñé que podía levantarme, pero no me pude dormir de la emoción.
pensé en el café esperando que venga boca a tomarlo. en su calor pasando y la crujiente tostada atragantada resbalando por la garganta.

ayer me levante temprano y con sueño. la mañana era clara y nublada, se respiro aire.
y el resto del día fue luz.
pies andando sin prisa por un solo día.

hoy volví a soñar que podía tomar un gusto distinto en los ojos.
encontrar eso que me daría cuerda para llegar a tiempo.
dejar nada a un lado y gritar un gracias, ¿¡despertaste!?

pero me quede dormido, otra vez.

en la suma de consecutivos pasados amontonados por un ya no existimos mas que en palabras.
fuera de contexto.
sin cuidado fumadas en una seca de minuto menos de pulmón puro.

y un día cerras los ojos.
y al otro los abrís.

voy a tirarme a un lado para ver si las rodillas descansan de tanta cinta corredora.